Mitos y leyendas: usos en la historia
El romero (del latín ros marinus o rocío de mar) siempre ha representado la buena salud inspirando una serie de leyendas y creencias, aquí tenéis algunas:
- Antiguamente se creía que las flores puestas en contacto de la piel daban la felicidad tal como las hojas puestas bajo la cama evitaban las pesadillas o que una planta sobre el alféizar alejaba las enfermedades.
- Además de representar el renacimiento y la inmortalidad está considerada una planta de buen agüero, sinceridad, fidelidad y felicidad.
- El aceite de romero es energizante y vigorizante.
- Mejora los procesos digestivos, es colagogo y regulador de la función intestinal.
- Es muy buen reconstituyente por los efectos que produce sobre el sistema nervioso y circulatorio, siendo recomendado en las astenias y convalecencias.
- También está indicado para las personas mayores, para evitar la pérdida de memoria y todos los males relacionados con disfunciones del sistema nervioso.
- El aceite de romero, además de drenante del hígado restablece el equilibrio hormonal y nervioso.
- Relanza la energía del plexo solar con su fragancia caliente y mediterránea.
- Por vía externa es antiinflamatorio, rubefaciente (enrojece la piel) y antiséptico, y está indicado como preventivo de arrugas y acné. También disuelve las acumulaciones celulíticas.
Y vosotros, ¿sabéis alguna curiosidad más sobre el aceite de romero?
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María José Martínez Caballero
La Dra. María José Martínez Caballero es licenciada en Medicina y Cirugía por la Universidad de Zaragoza. Ejerce como médico desde hace más de veinte años, y su pasión por la cosmética se remonta a unos cuantos años en que empezó a buscar el punto en el que coinciden la salud con la belleza. Desde entonces la búsqueda imparable de activos en la naturaleza que lo contiene todo, y sus desarrollos con la biotecnología sigue siendo uno de sus objetivos en su vida profesional y personal.